Los reguladores chinos exigieron que se realicen pruebas de resistencia a una serie de sectores, como el cementero y acerero, antes de otorgarles préstamos, ya que su futuro está vinculado al mercado inmobiliario, que está al borde de una contracción, dijeron medios de prensa oficiales el viernes. Las pruebas, que son parte de una investigación mayor sobre la capacidad de los bancos de sostener las caídas de precios de la vivienda, muestran la determinación del Gobierno de implementar una política de austeridad hasta que se calme el sector inmobiliario. Estas pruebas investigarán el impacto de un desplome del 60 por ciento en el precio de las viviendas, pero los analistas avisaron que no se pueden sacar demasiadas conclusiones del peor escenario, ya que dijeron que el mercado posiblemente se debilitará pero no colapsará de manera tan espectacular. "El sistema bancario ha dado muchos préstamos a las industrias vinculadas al mercado inmobiliario y los riesgos (de estos préstamos) están íntimamente ligados con este sector", dijo el diario Shanghai Securities News.
EXCELSIOR
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