La economía alemana creció un poco más de lo pronosticado en el segundo trimestre, pero un indicador clave de la confianza inversionista bajó inesperadamente, indicio de que aumentan los temores de que la crisis financiera de la Unión Europea será una rémora creciente en la economía más grande del bloque. La Oficina Federal de Estadísticas dijo que la economía alemana creció un 0,3% en el segundo trimestre, frente al 0,2% pronosticado, pero menos que el 0,5% del primero. Un desglose de las cifras trimestrales se publicará hasta fines de mes, pero la oficina de estadísticas dijo que las exportaciones y el gasto del consumidor, junto con un menor desempleo impulsaron el crecimiento. Con todo, hubo un indicador negativo: el sector de la maquinaria y pertrechos, posible indicio de que las empresas tienen menos confianza en el futuro.
EL NUEVO HERALD
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