Las empresas ancla de la industria automotriz en la entidad compran en el exterior poco más de 42% de sus componentes, señaló Francisco Ramírez Reséndiz, director general de Lensys, firma de consultoría. Explicó que este alto número de importaciones son producto de que las empresas proveedoras locales no han incursionado en la producción de sistemas de suspensión y frenos ni en componentes del tren motriz. Según indicadores de la industria nacional del transporte de México, las compañías automotrices tienen una cartera disponible equivalente a los 28,000 millones de dólares (mdd) en proveeduría, de la que ya se producen 15,000 millones en México. "En la medida que hagamos que los proveedores sean más competitivos, tengan mayor calidad, mejoren sus tiempos de entrega y obtengan menores costos de su producción, para que sean comparables con cualquier país del mundo, se podrá hacer mayor número de componentes", aseveró Ramírez Reséndiz, quien trabajó 30 años en la fabricante de autopartes Tremec, donde ocupó el cargo de director general. La industria automotriz en Querétaro, aseguró, sigue estando muy fuerte, pero no sólo se debe ver a este estado, es un sector de competencia regional, que incluye a los estados de Guanajuato, San Luis Potosí, Aguascalientes, Puebla y Jalisco. "Todo el centro del país está teniendo un impulso muy fuerte para producir automóviles." El escenario pinta que en muy pocos años la producción de vehículos en México se va a duplicar. "Si nos ha tomado 40 años llegar a producir 2.7 millones de vehículos, en tan sólo los próximos 4 o 5 años se va a duplicar", afirmó. Según Ramírez Reséndiz, en la proveeduría del sector automotor aún se contrata mucha mano de obra barata, pues se ha evolucionado poco en la realización de diseño de componentes. Sin embargo, empresas como Tremec producen en la entidad transmisiones hechas por mexicanos para las marcas Camaro y Mustang, entre otras.
EL FINANCIERO
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