Brasil aplaudió la candidatura del jefe del banco central mexicano al máximo cargo del FMI como un paso adelante para las economías emergentes, pero evitó ofrecer su apoyo, diciendo que necesitaba más tiempo para decidir qué candidato apoyar. Agustín Carstens se encuentra en Brasil durante una gira global para reunir apoyo para su arriesgada apuesta para liderar el Fondo Monetario Internacional, con sede en Washington, contra la ministra de Economía francesa, Christine Lagarde, quien comenzó el lunes su campaña global en el país sudamericano. Aunque Brasil ha estado entre las voces más altas que han pedido más poder para los mercados emergentes en los asuntos económicos globales, fuentes gubernamentales indicaron que el país se inclina hacia Lagarde, ya que la candidata francesa tendría mayor influencia para realizar reformas al interior del organismo. “Las economías emergentes están subrepresentadas en el liderazgo del fondo, especialmente los países de América Latina”, dijo el ministro de Hacienda brasileño, Guido Mantega, en una conferencia de prensa con Carstens en la capital, Brasilia.
EXCELSIOR
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