La crisis de deuda de Irlanda es única y no existen riesgos de que pueda propagarse a otros países con elevadas deudas de la zona euro, dijo hoy el vicecanciller alemán Guido Westerwelle. Los miembros de la UE observan con temor los problemas de Irlanda, ya que una creciente crisis política en el país amenaza con retrasar los planes de un rescate internacional, aún con el recuerdo vivo del lento y doloroso proceso de rescate a Grecia en mayo de este año. "A diferencia del caso griego, ahora tenemos un instrumento y estamos preparados para reaccionar", dijo Westerwelle al Rheinische Post, en alusión a la red de seguridad financiera internacional establecida tras la crisis griega. "No veo riesgo de contagio, porque cada caso es diferente", añadió.
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